Los distribuidores de zanahorias se han encontrado con que, de pronto, miles de pastelerías de toda España han empezado a encargarle producto. La zanahoria, una de las verduras más versátiles que podemos encontrar, pasaba a sí de ser la estrella de guisos y encurtidos a formar parte de los indispensables postres, gracias a una tarta que estaba haciendo las delicias de los hipsters. La tarta era bastante parecida a un bizcocho pero contaba con grandes cantidades de zanahoria y azúcar moreno, además de ir recubierta de una crema dulce de queso y mantequilla.

La clave era que las Zanahorias Medrano mantenían una mayor esponjosidad al bizcocho, manteniéndolo más húmedo y evitando su sequedad. Solo los paladares más exigentes podían notar el regusto a zanahoria y eso lo hizo más popular ya que se convirtió en una forma de comer verduras sin notar su sabor y haciendo lo que más gusta a niños y adultos: merendar y desayunar postres.

En estos últimos años, los distribuidores de zanahorias han visto como hasta los pasteleros más reconocidos trataban de reinterpretar esta nueva moda hipster y llegaba a las cartas de los restaurantes de Estrella Michelín. Todo el mundo conoce ya estas tartas y todos están de acuerdo con qué no puede haber nada más rico. La sencillez de su elaboración y su ligereza, muy superior a la de un bizcocho tradicional, han convertido a la misma en un recurso al que acudir cuando queremos quedar como personas modernas sin aplicar innovadoras técnicas culinarias o hacer postres demasiado pesados.