La mayoría de los distribuidores de zanahorias que podemos encontrar en España se centran en cultivar la zanahoria anaranjada. Esta es la variedad más extendida por el mundo dado que su núcleo es menos fibroso y bastante más sabroso que otras especies, como la zanahoria silvestre.

Las diferentes variedades que podemos encontrar deben su clasificación al tamaño de la raíz. Cada una de ellas tiene unas características exclusivas que las harán ser las más apropiadas tanto para ciertas modalidades de cultivo como para diferentes usos industriales o gastronómicos.

Lo habitual es que los distribuidores de zanahorias se dediquen plenamente a cultivar zanahorias de raíz semilarga y gruesa. Esta variedad es la más rentable que encontramos debido a la gran producción que genera y a su tamaño óptimo, sin duda suele ser la más buscada por los consumidores. Otra variedad surge de arrancar prematuramente algunas especies de zanahoria cuando apenas han alcanzado uno o dos centímetros de grosor. Esto se hace para no dejar que se desarrolle por completo y conseguir que su sabor sea mucho más intenso.

Las zanahorias de raíz corta son muy apropiadas si nos retrasamos en la fecha de la siembra, ya que su desarrollo se produce de una manera muy acelerada. Su rendimiento es bastante menor y por esa razón su cultivo no está tan normalizado. Por otra parte, en la actualidad se está incrementando el número de agricultores que se dedican a ella. Su demanda ha crecido debido a que cada vez más restaurantes apuestan por ellas para darle un acabado espectacular a sus platos.

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